sábado, 20 de diciembre de 2014

Cuento de humor: "Romero y Juliana"

Cuentos breves, para sonreír brevemente a la brevedad posible

“Romero y Juliana”
(La sangrienta tragedia de los amantes de verano)

Hubo dos familias muy notorias en el renacimiento, que con sus altanerías, soberbia, peleas,  enfrentamientos y tragedias, marcaron para siempre la historia de la comarca: los Copuletti y los Montados.
-Los Copuletti son ricos, muy ricos- dijo un jíbaro luego de fagocitarse a uno de ellos que se había perdido en el bosque.  Pero además eran poseedores de una inmensa fortuna (los Copuletti, no los jíbaros) que los convertían prácticamente en dueños de todo cuanto allí había.
Casi tanta como su riqueza, era también la soberbia que ostentaban por tal situación, por lo que generalmente menospreciaban al resto de los pobladores, generándose así un recelo difícil de disimular.
Los Montados por su parte, eran una familia humilde, que siempre supo ganarse el pan con el sudor de su frente, y de otras partes también.  Pero por ser modestos trabajadores, jamás tuvieron posesiones ni riquezas de ningún tipo.  Ninguna persona de esa familia nunca fue rica.  Tanto así, que ni siquiera las comidas que preparaban obtenían ese calificativo.
Durante décadas, los Montados fueron vituperados, avasallados, reprendidos, execrados, aborrecidos, abominados, y hasta violados sistemáticamente por la familia de los Copuletti, sus archienemigos más feroces del condado.  Es decir, los Montados eran ídem por los Copuletti.
Cuando algunos años después, los primeros (Los ídem) lograron tener una mejor posición (y se irguieron un poco, ya que los dolores de espalda los estaban matando), comenzaron a enfrentarlos sin amilanarse por la historia que los signaba como sumisos perdedores,  y los combatieron de igual a igual en cada pelea callejera que se producía, dando origen así por primera vez al conocido “Interruptus-Copuletti”, hecho determinante, inequívoco y absolutamente preciso, que suele denotar un momento y una situación concreta, y que se ha trasladado hasta nuestros días, bajo el nombre de “Quién es el imbécil que toca el timbre justo ahora????”
El joven más joven de los jóvenes de los Montados, era conocido por su gran cantidad de cualidades y talentos congénitos, los que obviamente había perdido al momento de nacer.
Era más conocido por su seudónimo de “Romero infectado” que por su propio nombre, ya que según decían las malas lenguas (las que lo habían probado y ponían cara de asco), no servía ni para condimento.
Por su parte en la familia de los Copuletti, la adolescencia se expresaba ya en la vida de Juliana, la hija menor del padre de todas las hermanas y sobrina de todas las hermanas del padre de todas las hermanas de Juliana, que a su vez eran las sobrinas de todas las hijas de... Buéh, en fin... pertenecían a varios árboles genealógicos, llenos de mujeres que ya habían sido desflorados (los árboles).
Juliana se asomaba ahora, repentinamente a la pubertad y a la nueva vida de dejar de ser una niña para comenzar a ser una mujer.  Lo notaba en su rostro en donde comenzaban a aparecer algunos granos, en sus pechos que iban aumentando de tamaño y en sus manos,  manchadas con algunas gotas de sangre. Más que asomarse a la pubertad, convendría decir que se iba encerrando, por la propia timidez de la edad y por el cinturón de castidad que el celoso padre le había mandado colocar, ya que en esa época se pensaba que la autosatisfacción sexual en las adolescentes, podría llegar a causar enfermedades físicas y mentales.  (No caben dudas que al que le tendrían que haber puesto un cinturón de esas características era al padre, y en el cerebro).
Además la chica, según expresas órdenes de su padre, estaba siendo vigilada muy de cerca por el ama de llaves, quien como  ella misma decía (el ama, no Juliana) portaba las llaves de la felicidad (por eso lo de “Ama de llaves=Dueña de las llaves”) La chica no entendió el significado de aquella frase (el de la felicidad, no el de las llaves), hasta el día en que sin querer, cabalgando por las caminos del pueblo, el candadito de hierro que sujetaba el cinturón de castidad, se dio vuelta y se le fue para adentro... del cinturón.  Se podría decir que conoció la felicidad de golpe y muy profundamente.  Desde ese día comenzó la desesperada búsqueda de su príncipe azul o -según la excitación del momento-, del color que fuera.
Habían llegado muchas versiones a oídos del padre, que alguien de la familia de los Montados, estaba interesado en Juliana, el padre entonces, para prevenir disgustos, solicitó al herrero del pueblo el diseño de un cinturón de castidad que revistiera una característica especial:  exigió que en la abertura por donde la doncella expelía sus necesidades, tuviese filosas navajas, para que a ningún amante furtivo se le ocurriese siquiera acercarse a ella.  Sin embargo parece que ese diseño tuvo un efecto poco deseado, ya que a partir de ese día, se cree que  los sirvientes estuvieron en desacuerdo y como forma de protesta se entregaron a un absoluto voto de silencio, ya que ninguno, nunca más pudo hablar.
El herrero del pueblo, que se había deslumbrado con la original idea de aquel cinturón, fabricó uno incluso para su esposa, y fue entonces cuando comenzó a pensar que alguna rara peste había invadido el pueblo, ya que el carnicero, el lechero y a otros tres comerciantes más que llegaban hasta su casa con sus mercaderías, habían sufrido también el mismo efecto.  
Existen pruebas documentales (aunque en blanco y negro y sin subtítulos) que el padre de Juliana, tenía una verdadera e irrefutable obsesión con la virginidad de su hija menor.  Tanto que hasta llegó a declamar, en cierta noche de copas con sus amigos, aquella famosa frase de: “Mi hija morirá virgen... O no morirá jamás”
La superproducción de testosterona que Romero fabricaba diariamente, superaba ampliamente su capacidad de vertido manual, por lo que empezó a temer un desborde otorrinolaringológico, tanto que el cinturón, como el celoso padre, le importaron muy poco como impedimento y se lanzó a la conquista de la muchacha.
Pero no se lanzó tan bien como debía, ya que comprendió un poco tarde que no era beneficioso para aventuras como esas, usar armaduras tan engorrosas para moverse, y por otra parte, el techo de la casa contigua donde habitaba Juliana, tenía un metro más de lo que él había calculado para saltar hasta su alcoba.  Cuando llegó abajo, sintió la decepción del fallo, la angustia del revés, la frustración del fracaso y el tremendo golpe contra el piso. De su plateada y reluciente armadura no quedó mucho. Apenas si la parte que le cubría los codos, las rodillas y la pelvis, diseño que mucho tiempo después seria copiado por los amantes del skate, salvo la parte que le cubría la pelvis.  Ese fue el comienzo del conocido calzoncillo de lata.
Según dice la sabiduría popular, siempre hay algo que tira más que un carro de bueyes, así que maltrecho (y mal hecho) como estaba, se volvió a levantar e intentó trepar por las paredes de la casa.
Cuando estaba casi alcanzando su objetivo, un ladrillo flojo en una de las cornisas, fue arrancado sin querer con su bota, y así perdió el pié, el equilibrio, el soporte y casi hasta la vida por el nuevo golpe contra el piso.
En el momento que Juliana escuchó este segundo golpe reaccionó inmediatamente, ya que no lo había hecho en el primero de los estruendos, porque se había mezclado con el ruido de las cacerolas que siempre se le caían al ama de llaves en la cocina.   Se asomó entonces al famoso balcón que luego la historia se encargaría de bautizar como “17 de octubre”, y desde allí se dirigió dulcemente a su amado que yacía algo sangrante en el piso
 -¿Sos estúpido o te hacés? Mi papá salió y la puerta está abierta! ¡¿Porqué no subís por la escalera, imbécil?!
El joven Romero, aún con una leve hemorragia y cojo, se levantó presuroso, detuvo la primera y se fue en busca de la segunda.  El entorno estaba servido como en bandeja de plata.  El Padre como quedaba claro no se encontraba en la casa.  Había ido a visitar a las monjas de clausura del convento, las cuales agradecían más que gustosas tal cortesía, agasajando al invitado con todo tipo de dulces y néctares que solían producir con sus propias manos.  Y Copuletti amaba todo lo que ellas hacían con sus manos.
Por su parte, en la casa, el ama de llaves estaba muy ocupada con los ruidos de sus cacharros recogiéndolos agachada, y los jóvenes amantes de verano algo parecido, por los ruidos que hacían el cinturón de ella y el calzoncillo de él, incluyendo la misma posición.  Se podría decir que todo estaba servido a pedir de boca, sobre todo por la incomodidad de tanta chatarra en los lugares claves.
Pero todo cuento rosado, se puede transformar en tragedia de rojo intenso, color sangre.
El Padre de los Copuletti, luego de haber saboreado los néctares de las monjas, y luego de haber acabado su visita al convento, volvió raudamente a su casa.  Cuando llegó, le llamaron la atención las dos huellas de sangre encontradas en el piso que lo conducían hasta la alcoba de su hija, la del muchacho por sus heridas y la de ella con su período.
Temió lo peor (que su hija hubiese perdido la virginidad con un amante furtivo y plebeyo), pero lo desesperó aún más el ama de llaves, que llorando en la puerta de la alcoba le confesó que quién se encontraba adentro con la niña, era uno de los Montados.  A Copulleti lo invadió la cólera, el tifus, la fiebre amarilla, roja y hasta la intestinal.  La fiebre aumentó en forma desproporcionada y tal calentura, lo llevó a buscar un lugar más fresco, es decir, tal enfado lo sacó fuera de sí y lo entró a la habitación.
El panorama que descubrió al abrir la puerta de aquella habitación, fue indescriptible y absolutamente desolador... ya que allí no había nadie.
Se dirigió entonces a la alcoba interna, donde se encontraba la cama de su hija y los supuestos amantes, y cuando ingresó en ella, la tragedia se descubrió ante sus ojos brutal y cruel, mientras su  alma se desgarraba en pedazos.
Allí se encontraban retorcidos entre las sábanas,  empapados en sangre, los jóvenes amantes de verano.  Ella con una tenue sonrisa dibujada en su rostro, casi ahorcada con el calzoncillo de lata en su cuello, y él casi decapitado o convertido a otra religión.
El padre no supo ni pudo aguantar tanta angustia y dolor, y salió corriendo nuevamente hacia el convento en busca del consuelo de las monjas.
Los amantes de verano, al escuchar los gritos desconsolados del padre que se alejaba, abrieron sus ojos aún extenuados, se sonrieron mutuamente y sin importarles las manchas de sangre que aún los , cubrían, volvieron a prodigarse amor con toda pasión.

H.D.M.

viernes, 19 de diciembre de 2014

Jugando III

¿De quién se trata?

Única pista:

Actriz






(La respuesta en
el próximo "Jugando IV")












Solución del Jugando II:
Bruce Willis

(Único acierto: Anahí)






jueves, 18 de diciembre de 2014

Novedades: "Mi mujer es el plomero" en Cuenca , España

"Mi mujer es el plomero" en Cuenca, España


Etimología de frases muy nuestras

"Hablar por boca de ganso"


Este dicho -a pesar de lo que muchos piensan- no tiene nada que ver con el animal que todo conocemos como  ganso.
Antiguamente, los hijos de los nobles y de los ricos eran formados y educados por una especie de monitor o ayo llamado, precisamente,ganso. Estos  gansos  o ayos ejercían una función educativa y pedagógica, por lo general rígida y dogmática, es decir, algo equivalente a lo que hoy llamamos "enseñanza enciclopedista".
De manera que los niños repetían casi memoriosa y literalmente lo que habían escuchado de  boca del ganso, y como casualmente estos  gansos  solían caminar por los caminos de palacio seguidos por los niños en fila india -tal como marchan los gansos con sus crías- la tradición popular se encargó de acuñar la frase  hablar por boca de ganso,  para dar a entender que alguien repite lo que otro ha dicho, como si fuera propio, pero sin el correspondiente discernimiento. Otro factor que ayudó a confundir el "ganso-ayo" con el "ganso-animal" es el hecho de que el ganso es un animal que tiene fama de tonto, ya sea por su escasa inteligencia o por el sonido de su voz gutural, elementos que han dado origen a la expresión "la risa abunda en la boca de los gansos", generalmente aplicada a la persona que se ríe tonta y constantemente, sin motivo.

Teatreando


miércoles, 17 de diciembre de 2014

Dos puntos: a saber... (El saber solo molesta a quien se beneficia con la ignorancia)

Dos puntos: a saber...

1) ¿Porqué escarban los perros?

Escarbar es un hábito y un instinto natural que los perros tienen e intentan llevar a cabo cada vez que tienen la ocasión.
Depende del perro, este acto será más o menos frecuente, o incluso nulo. Hay perros que no lo hacen nunca, otros con mucha frecuencia y algunos esporádicamente.
Las razones principales por las que se debe este comportamiento suele ser por puro instinto y diversión. Les gusta esconder cosas y rebuscar.  Se cree que los perros escarban por su instinto de guardar comida, refugiar a sus cachorros, o evitar las temperaturas extremas.
Obviamente, también puede deberse al instinto de “sabueso” de nuestro perro, ya que es posible que haya visto u olido algo interesante, y simplemente este buscándolo para averiguar que es.
En la otra cara de la moneda está la parte más preocupante. Y es que este acto puede deberse en determinadas ocasiones a un problema de ansiedad.  Escarbar puede convertirse en una actitud compulsiva si el perro tiene ansiedad, ya que llevaría a cabo ésta para descargarla y desestresarse.

2) Extraña raza: Pastor Bergamasco

Es el perro rastafari por excelencia junto al Komondor, solo que éste le gana en rastas.
Estos perros son inteligentes, atentos y pacientes. Tienen un temperamento estable y gran concentración, por lo que son excelentes perros para múltiples funciones y especialmente para conducir y cuidar rebaños.
Los pastores bergamascos son perros pacíficos que no suelen mostrar agresión, por lo que no son muy buenos como perros de ataque. Sin embargo, son reservados con los extraños, por lo que pueden ser buenos perros guardianes. Tienden a llevarse bien con sus humanos y con los niños en general. También suelen llevarse bien con otros perros y tienen cierta facilidad para socializar con otras mascotas. Por supuesto, para tener un bergamasco equilibrado, es necesario socializarlo desde cachorro.

Jugando II

¿De quién se trata?


Única pista:

Actor



(La respuesta, en el próximo "Jugando III")


























Respuesta del "Jugando I":

Jennifer López



martes, 16 de diciembre de 2014

Link para descargar "La joya de mi cuñado"

Link para descargar el texto de
"la joya de mi cuñado"
Y todas mis comedias!!
(Haciendo click en el título)

   

Reflexión

Vamos a “hacerlo” antes que choquen los planetas!!
Porque...
-Se puede “hacer” en cualquier lugar.
-No hay horas para “hacerlo”, aunque muchos prefieran los horarios nocturnos.
-Para quien lo “hace”, es uno de los mayores placeres que existen.
-Los expertos recomiendan “hacerlo” siempre, sin importar la edad.
-”La primera vez” todos sienten miedo.  Pero luego aprenden a disfrutarlo.
-Al principio, por la falta de experiencia, cuesta mucho “hacerlo” bien.  
  Pero con el tiempo uno puede llegar a disfrutar más de dos horas ininterrumpidas
-Antes de “hacerlo”, la excitación no se puede contener.
-Es muy placentero “hacerlo” y sin embargo el éxtasis llega cuando se acaba.
-Después de “hacerlo”, uno queda exhausto.
-La inmensa mayoría lo “hace” por placer, aunque no faltan quienes lo “hacen” por dinero.
-“Hacerlo” puede llegar a crear adicción.
-Nadie puede decir que “hacerlo” sea una pérdida de tiempo.
-Se puede “hacer” todos los días, aunque muchos prefieran los fines de semanas.
-Aunque sea un placer “hacerlo”, casi todos disfrutan también mirando cuando
  otros lo “hacen”
-Generalmente se “hace” entre hombres y mujeres...
  O entre mujeres solas...
  O entre hombres...
  Y hasta incluso “hacerlo” sólo, es muy satisfactorio.

Así que no perdamos más tiempo...
Vamos a “hacer teatro”!!!!

H.D.M.


Teatreando


Etimología de frases muy nuestras

"No dar pie con bola"

No acertar. Equivocarse continuamente. Frase más común: "estaba nervioso y no dio pie con bola".
Pese a lo que pudiera parecer, el dicho nada tiene que ver con los desaciertos futbolísticos, ya que su origen, muy antiguo, por cierto, hay que buscarlo en los juegos de naipes.
Al jugador que echa cartas en último lugar, por oposición al llamado "mano" -que es quien echa primero-, se le denomina "pie". "Bola" era un lance de algunos juegos que consiste en dejar escapar algunas bazas para llevarse otras de más valor, misión que correspondía al "pie". Si el "pie" no daba con la "bola", el juego se perdía. De allí, también una frase muy argentina "No dar bola".

lunes, 15 de diciembre de 2014

Tristes curiosidades que dan risa

"Contrato de Maestra de escuela, en 1923"

En varios lugares se dice que el contrato es de España, pero en realidad pertenece a Estados Unidos y esta incluido en el libro “Maestros y textos” que Michael W.Apple editó en 1989.

Este es un acuerdo entre la señorita…………………………………………………….maestra, y el Consejo de Educación de la Escuela………………………………..por la cual la señorita ……………………………….acuerda impartir clases durante un período de ocho meses a partir del……………………… de septiembre de 1923. El Consejo de Educación acuerda pagar a la señorita……………………………………………… la cantidad de (    ) mensuales.

La señorita…………………………………………………………..acuerda:

1.- No casarse. Este contrato queda automáticamente anulado y sin efecto si la maestra se casa.
2.- No andar en compañía de hombres.
3.- Estar en su casa entre las 8:00 de la tarde y las 6:00 de la mañana a menos que sea para atender función escolar.
4.- No pasearse por heladerías del centro de la ciudad.
5.- No abandonar la ciudad bajo ningún concepto sin permiso del presidente del Consejo de Delegados.
6.- No fumar cigarrillos. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encontrara a la maestra fumando.
7.- No beber cerveza, vino ni whisky. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encuentra a la maestra bebiendo cerveza, vino y whisky.
8.- No viajar en coche o automóvil con ningún hombre excepto su hermano o su padre.
9.- No vestir ropas de colores brillantes.
10.- No teñirse el pelo.
11.- Usar al menos 2 enaguas.
12.- No usar vestidos que queden a más de cinco centímetros por encima de los tobillos.
13.- Mantener limpia el aula:
a) Barrer el suelo al menos una vez al día.
b)Fregar el suelo del aula al menos una vez por semana con agua caliente.
c)Limpiar la pizarra al menos una vez al día.
d)Encender el fuego a las 7:00, de modo que la habitación esté caliente a las 8:00 cuando lleguen los niños.
14.- No usar polvos faciales, no maquillarse ni pintarse los labios.
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Jugando

¿De quién se trata?

Única pista:

Cantante


(La respuesta, en el próximo "jugando")

Carteles graciosos



domingo, 14 de diciembre de 2014

Dos puntos a saber... (El saber solo molesta a quien se beneficia con la ignorancia)

DOS PUNTOS: A SABER...

1) Los primeros libros de mapas tenían en la cubierta un grabado de un héroe mitológico llamado Atlas, cargando al mundo. Por eso los mapas del mundo son llamados "Atlas"


2) Nueva Zelanda fue el primer país en permitir el voto de las mujeres en 1893.